Con amor les comparto este mensaje que me hizo reflexionar y me ayudó a tomar la mejor decisión de mi vida.
Quizá tú vas a la iglesia, pero sabes que no hay un deseo en
tu corazón por Dios, lo has intentado todo, ganar Su favor con un ministerio,
sirviendo, pero eso no ha quitado el amor por esos pecados ocultos, esos que a
nadie has dicho, tú sabes que llevas meses o quizá años sin orar, sin buscar a
Dios y que realmente sigues amando al mundo, pero has logrado controlar ese
deseo, pero lo que te hace feliz es el entretenimiento, ya sea en la iglesia o
fuera de ella.
La condición de "hijo mayor" es peor que la del
"hijo pródigo" porque piensas que sirviendo cubres tu falta de pasión
por Dios, no te engañes a ti mismo, si no buscas a Dios diariamente en oración,
leyendo Su palabra, lidiando con tu pecado, te estás engañando.
Amigo, vuelve a Cristo, si la iglesia solo te entretiene,
pero no te incomoda lo que escuchas, no te lleva a evaluar semana a semana tu
vida y a odiar el pecado, huye de ese lugar, esta en juego tu alma, tu
eternidad pinta terrible, pasarla bien en la iglesia solamente, tener buenos
amigos ahí y servir más que los demás sin tener realmente una relación con Dios
te va a destruir.
No seas indulgente contigo mismo, si no oras, no amas Su ley
y tu vida devocional en el mejor de los casos se ha resumido a leer un librito
con 10 versículos y una explicación de ellos, amado, tu alma esta en riesgo, si
tu confianza es porque repetiste "sinceramente" un día una oración,
pero tú sabes que no ha habido una transformación dentro de ti y un
arrepentimiento genuino, un deseo por Dios, esa oración vale lo mismo que un
rezo en un velorio.
Pero hay solución en Cristo, corre a Él, El jamás ha echado
fuera a nadie, el corazón contrito y humillado no será desechado por El, aunque
estés ya solo humeando, Él no te apagará, y si roto estas, El es poderoso para
sanarte.
No pienses que la vida aquí es larga, todos tenemos un
enemigo que no podremos evitar: la muerte, no tengas otro enemigo, no seas
hallado siendo enemigo de Dios también.
Si has leído hasta
aquí, entiende, Dios espera y es paciente, pero un día sencillamente dejará que
tu pie resbale y ya no habrá más que hacer.
Hay tiempo, corre a Dios, que te deje de importar el qué
dirán los demás, ellos no te pueden salvar, y si Dios te perdona ¿qué importa
si los demás no lo hacen?
Si tú pastor sólo predica historias personales, testimonios
del "poder de Dios" y de cómo lograr ser mejor cada día, de cómo
atravesar las tormentas de la vida, de crecer en la unción, de cómo subir a
"otro nivel" o de impactar a esta generación con entretenimiento
pídele respetuosamente que te predique a Cristo, no los mismos mensajes semana
a semana, si La solución a tu problema fuera el dinero, créeme que Dios lo
haría llover sobre ti, o si fuera salud, ya te hubiera sanado, nuestro problema
es el pecado y por eso Dios envió un Salvador y no un economista o un médico.
Si te has alejado de la iglesia, o peor aún, estás dentro de
una, pero tú corazón está lejos de Cristo, te importa más tu equipo de fútbol o
tu pasatiempo, entonces ve a Él, no lo dejes para otro día, no seas hallado
necio y terco en tu corazón, no seas sabio en tu prudencia, tú sabes si eres
cristiano o no lo eres.
¡Pero lo puedes ser!
Su Espíritu puede llevarte a salvación, solo clama a Él, obedécele y no busques
entretenimiento, busca disciplina espiritual, el alfarero no da tregua al barro
cuando lo está formando, el fuego no da espacio de descanso cuando de quemar la
Impureza de la plata se trata, Dios no juega con nosotros, nos forma y nos hace
como Cristo, no como el mundo.
Evalúa tu vida y sé duro contigo mismo, como Pablo decía:
azota tu propio cuerpo, crece, madura, deja los juegos y toma tu Biblia, léela,
subráyala y escribe tantas veces sobre ella tus notas personales hasta que
quede casi inservible el papel, y después toma Otra y otra haz lo mismo, ora al
despertar, ora antes de dormir, pregunta a otros si realmente ven un cambio en
ti, has preguntas duras e incómodas a tus amigos y deja que ellos lo hagan
contigo, deja de perder el tiempo porque los días son malos y El Señor no
tarda.
Quiera Dios usar estos renglones tengo al mejor y único
salvador.
Busca a Dios mientras
haya tiempo, un día no lo habrá, un día doblaras la rodilla delante de Él y
confesarás que es El Señor. La pregunta es ¿lo harás con gozo supremo de
mirarle? ¿O lo harás aterrorizado porque sabes que tienes delante a un Dios que
ignoraste toda tu vida?
Con amor.
Alguien que de ningún
modo es mejor que tú y que ha estado como hijo pródigo y como uno lleno de
orgullo y soberbia como el hijo mayor. Quiera Dios seguirme quebrantando y
hacerme más como Su hijo.
Bendiciones
Pastor Roberto Ramírez